La economía mundial en punto crítico; China
En un encuentro con récord de asistencia, el presidente de China, Xi Jinping, abrió la cumbre de líderes del G-20 con una advertencia: ocho años después de la crisis financiera internacional, la economía mundial vuelve a estar en un punto crítico.
No fue la única alerta del líder de una de las economías más grandes del mundo. El proteccionismo, sostuvo, va en aumento, y el régimen comercial multilateral está en una situación difícil y pese a los avances que se han seguido en la reforma financiera regulatoria, sigue existiendo el riesgo de burbujas.
Desde el monumental Centro Internacional de Convenciones, Xi Jinping pidió tomar medidas concretas sin discusiones huecas, y exhortó a una mayor cooperación en materia de impuestos, medidas anticorrupción y para mejorar la capacidad de la economía mundial para resistir los riesgos.
Antes de la apertura de la cumbre, en un encuentro entre el presidente de China con su similar de Estados Unidos, Barack Obama, ambos ratificaron el acuerdo sobre cambio climático de París (COP21) de diciembre de 2015.
La suscripción del documento fue recibida con beneplácito, sobre todo por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, porque se trata de dos de las naciones con mayores emisiones de gases de efecto invernadero. A través de este acuerdo se busca limitar las emisiones nocivas que producen el calentamiento global, paso clave para que pueda entrar en vigencia el pacto climático antes de fin de año, y marca el camino para que otros países concreten la iniciativa.
En su mensaje a los líderes del G-20, el presidente chino dijo que este mecanismo debe adaptarse a sus tiempos y mostrar el camino, adaptarse a la economía mundial y transformarse a un proceso de respuesta, con una visión de más largo plazo. Hace falta una visión estratégica, hace falta que el G-20 abra el camino para el crecimiento mundial.
Xi Jinping, que fue líder del Partido Comunista en la provincia de Zhejiang, cuya capital es Hangzhou, indicó que durante este encuentro los presidentes y jefes de Estado de las naciones más poderosas del mundo buscarán cómo abrir una nueva senda de crecimiento, una gobernanza más eficaz, un comercio incluyente interconectado, entre otras cuestiones.
El mandatario chino apuntó que si bien la economía mundial mantiene cierta recuperación, también enfrenta riesgos y retos como un crecimiento débil, disminución en la demanda e inversión, y volatilidad de los mercados financieros. Llamó a los mandatarios participantes a fortalecer la coordinación macroeconómica y promover el crecimiento mundial y la estabilidad financiera internacional.
Indicó: los miembros del G-20 deben aplicar políticas macroeconómicas más integrales, acordes con su realidad nacional, y deben coordinar sus políticas de reforma estructural y monetarias para aumentar la demanda mundial y mejorar la calidad de la oferta.
El líder chino pidió fortalecer la coordinación de políticas y reducir los impactos negativos, para apuntar hacia una nueva ruta y ritmo de crecimiento. Para ello, instó a seguir mejorando el sistema financiero y monetario así como fortalecer la estructura de gobierno de las instituciones financieras internacionales, afianzar la red de seguridad financiera mundial, aumentar la cooperación en cuestiones tributarias y en la lucha contra la corrupción para hacer a la economía internacional más resistente a los riesgos.
En materia comercial Xi Jinping llamó a continuar con la liberalización y facilitación del comercio y las inversiones, y cumplir el compromiso del G-20 de no adoptar nuevas medidas proteccionistas. Reiteró que una de las prioridades del G-20 para este año es el desarrollo, y para ello se ha impulsado un plan de ayuda para África y otros países menos avanzados.
Siempre y cuando actuemos juntos, podremos capotear el temporal de la economía y navegar a un futuro de crecimiento, sostuvo.
El presidente Xi Jinping pidió a los gobernantes de Estados Unidos, Alemania y otras economías que resistan la presión para elevar barreras comerciales, en el comienzo de esta cumbre que se realiza en un contexto de crecimiento global lento, disputas en torno a las exportaciones chinas de acero y los impuestos de Apple en Irlanda. Deberíamos construir una economía mundial abierta, sugirió.
La organización para esta cumbre incluyó un fastuoso espectáculo cultural –con fuegos pirotécnicos– desde el famoso Lago del Oeste, donde los mandatarios pasearon en bote, después de que lo hicieran Xi Jinping y su esposa Peng Liyuan.
Para este lunes habrá tres sesiones de trabajo más antes de la ceremonia de clausura y la suscripción de un comunicado de los líderes participantes.
Fuente y fotos: La Jornada