RESULTADOS DEL PROGRAMA JUNTOS POR LA SALUD DE FUNSALUD IMSS

VERSIÓN ESTENOGRÁFICA

RESULTADOS DEL PROGRAMA JUNTOS

POR LA SALUD DE FUNSALUD IMSS

Discurso del Director General del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS),  Maestro Zoé Robledo, durante la presentación de resultados del programa Juntos por la Salud, de FUNSALUD.

 Zoé Robledo.- Muchas gracias, muchas gracias Héctor, señor canciller, siempre es un gusto.

 Como ya lo ha dicho ya aquí Luis Alonso, la importancia de las pruebas IGG, es que quienes ya tuvimos la enfermedad, tenemos la certeza, por lo menos de tener algún tiempo de inmunidad y eso me permite quitarme el tapabocas, porque luego hablar con esto es complicado.

Sin duda esta ha sido toda una odisea, esta etapa de la vida nacional y como la Odisea, como el poema de Homero, se puede contar iniciando in medias res, empezando a la mitad y hoy creo que estamos ahí.

Estamos empezando a contar esta historia a la mitad del camino, recordando qué estaba pasando y en qué situación estábamos y qué es lo que teníamos qué hacer.

Justo cuando estábamos por firmar, por empezar a diseñar la estrategia que se hizo con el convenio con los hospitales privados de la asociación y del consorcio, estaba pasando algo al interior de las instituciones de salud, que deben ustedes de conocer.

Habíamos invocado un artículo de la Ley del Seguro Social, el 116, si no me equivoco; que establece cuáles son las situaciones y los escenarios en los que el Seguro Social tiene que abrir sus puertas a toda la población, también a la población sin seguridad social, a la población no derechohabiente.

Esto a partir de una situación en la cual la reconversión del IMSS había logrado ser uniforme a nivel nacional, es decir, nosotros habíamos calculado, junto con nuestros grandes médicos epidemiólogos como el doctor Mauricio Hernández, el doctor Borja también, una tasa de ataque que nos implicaba cuántas personas se iban a contagiar, cuántas iban a buscar atención, cuántas iban a requerir atención hospitalaria y cuantas de ellas iban a requerir atención en unidades de cuidados intensivos.

Y a partir de eso, implementar una reconversión. Sin embargo, en el momento en el que teníamos que recibir también a pacientes sin seguridad social, algo que teníamos que hacer, no solo porque fuera un tema legal, sino porque era algo que iba a estar escrito en la historia del Seguro Social, y que teníamos que salir a dar ese paso.

Como lo saben ustedes una reconversión implica que los recursos destinados en el IMSS, por ejemplo, a casi 800 tipos de padecimientos  y enfermedades, se dedicaran la mitad a una sola enfermedad, a un solo padecimiento, en este caso, pues a la COVID.

Entonces, ante ese escenario, en una discusión, en una sesión de trabajo con el presidente López Obrador, con el gabinete de salud, con nuestro nuevo integrante del gabinete de salud que es el canciller Ebrard y que estamos agradecidísimos que esté con nosotros porque ha sido una extraordinaria coordinación la que hemos tenido con él, nos dijo el presidente López Obrador, necesitamos reconvertir más.

Y entonces nosotros explicábamos cuáles eran los padecimientos, los tratamientos, que se pueden posponer y que ya habíamos pospuesto y cuáles más podíamos seguir posponiendo, hasta que llegábamos a un punto en las cosas que no se pueden posponer.

Porque a una mujer embarazada no le puede pedir uno que tenga más de 40 semanas y que nos espere para poderla atender o en el caso de algunas urgencias quirúrgicas no graves.

Como lo saben, en el IMSS tenemos 665 partos diarios, más 446 cesáreas, o sea son mil ciento once, en promedio,  mexicanas y mexicanos que nacen en una instalación del Seguro Social y se lo dijimos así.

Pues tendríamos que ver, cómo y en dónde atender a nuestras derechohabientes, a todas las mujeres embarazadas, a las 32 mil, que, en ese mes en particular, sabíamos que iban a dar a luz en el Seguro Social.

Y fue así, que se dijo, hablemos con los privados.

Esa conversación, que, además, tenía dos grandes retos. Primero, poder tener conocimiento de cuál era la capacidad instalada de los privados, y ahí es donde FUNSALUD cayó, de verdad, como en Chiapas decimos; como agüita de mayo, como una gran noticia, como algo que quizá era hasta inesperado.

De ver, cómo tenían en su plataforma, la capacidad de saber, a partir de qué necesitábamos, cómo expresábamos al sistema.

Estuvimos esa tarde, porque efectivamente en esa conversación que fue en la oficina de Mauricio, yo me fui a meter y estuvimos viendo estado por estado. Y qué pasaba si incrementábamos un padecimiento, qué pasaba si atendíamos esto.

Y en ese momento, algo que parecía impensable, y creo que es importante decirlo en la experiencia mexicana.

Cuando en otras partes del mundo lo que estábamos viendo era nacionalizaciones de hospitales privados, en democracias muy desarrolladas y destacadas, como la alemana, por ejemplo.

Entonces, había que cambiar una historia, y decirlo también, había quizás también hasta desconfianza en ese momento, de qué iba a pasar en la colaboración de los privados.

Y ahí, algo que dijo Lorena, me gustó mucho. Que el ritmo de esfuerzos como éste lo da la confianza, pero también lo da el liderazgo, y ahí el canciller Ebrard  fue fundamental.

Porque vio el diagnóstico, entendió las necesidades que teníamos cada una de las instituciones y se puso al frente de un esfuerzo, sin el cual, de verdad, no hubiéramos podido garantizar una instrucción del presidente  López Obrador: que en México no iba a haber un acuerdo del Consejo de Salubridad General, para el uso de recursos escasos en una pandemia.

Los acuerdos bioéticos que desafortunadamente países muy queridos tuvieron que llevar a cabo, para decidir y poderles decir a los médicos qué hacer cuando se tiene un ventilador y dos pacientes que necesitan hacer uso de él; o cuando se tienen tres pacientes que requieren una cama de hospital y no tienen.

Nos dijo: eso no va a pasar en México, la alternativa es seguir creciendo en la reconversión para que cada persona, cada mexicana, mexicano que requiera de una cama cuente con ella.

O que requiera efectivamente de un ventilador, pues cuente con él.

Entonces, esa reconversión no la hubiéramos podido hacer, efectivamente sin el convenio. Ver los números hoy, nos hablan, efectivamente del volumen, de la dimensión de los miles de mujeres embarazadas que pudimos referir, y que tuvieron un parto o una cesárea segura, y además en una gran instalación.

Pero si lo vemos de manera individual, pues es la historia de un mexicano, de una mexicana, que hoy está empezando su vida, y que tuvo una situación en donde instituciones públicas y privadas logramos ponernos de acuerdo.

Desde luego, los otros padecimientos han sido fundamentales para nuestras urgencias.

Desahogar simplemente las tres mil atenciones diarias que tenemos por hernias, pues significa que tenemos a tres mil 300 derechohabientes con hernias que no están en una Unidad Hospitalaria o en las Urgencias que están viendo principalmente COVID.

Entonces, de verdad, pues sí, ha sido una gran gran odisea; y estoy seguro que todos ya tenemos en nuestro horizonte, en nuestras ilusiones, en nuestras aspiraciones pues regresar a nuestro Ítaca,  y vamos a regresar.

Y creo que lo mejor es que vamos a regresar juntos, porque hoy el esfuerzo que está encabezando el Gobierno de México y en particular la Cancillería para  que tengamos disposición de las diferentes vacunas y los esfuerzos, para que tengamos disposición temprana de ellas, es la mejor forma de pensar y saber que hay esperanza.

Ayer conversábamos allá en San Luis Potosí, en la reunión CONAGO con el secretario Torruco, y me hacía una reflexión, me decía, si, en el momento en que logremos esto a finales de año, un sector económico tan importante para México como lo es el turismo, va a avanzar un año, frente a otros destinos turísticos  internacionales que quizá no van a tener esa oportunidad.

Y  eso implica una reactivación económica, quizá una de las actividades que siempre están al último en la reactivación, entretenimiento fuera de casa, actividades culturales, y turismo.

Entonces esto nos va a convertir también,  estoy seguro, se va a convertir en una ventaja competitiva para el país, para nuestra marca turística, que predice que la reactivación económica también va hacer mucho más, mucho más, mucho más veloz.

Entonces, esa segunda parte de la historia la estamos construyendo y la estamos construyendo hoy con unos niveles de confianza efectivamente, con amistades nuevas, con conocimiento por ejemplo,  con el Grupo MAC, con quienes estamos ya haciendo otras  cosas, como la subrogación y un programa para subrogar quimioterapias para  derechohabientes nuestros, particularmente pediátricos,  estamos en esa etapa también inicial, pero estamos viéndolo con muy buenos,  con muy buenos ojos.

Entonces, esto debe de servirnos también para que la pandemia nos deje esas lecciones, que podemos trabajar juntos y que podemos trabajar juntos, como lo dice este emblema que ha sido tan, tan esperanzador Juntos por la Salud.

Y juntos en esa base de confianza y de entendimiento de la pandemia nunca debemos de pensar cómo vamos a sobrevivir al COVID, tenemos que pensar cómo vamos a vivir con él el tiempo que sea necesario, con las pruebas  IGG, que también nosotros estamos convencidísimos de la Encuesta Serológica que hay que hacer, cómo encontrar más seguridad en los espacios de trabajo para el retorno laboral, pero también pensando cómo la dominamos para salir adelante como país y como sociedad.

Entonces, pues no me queda más que decir muchas, muchas gracias,  al Instituto Mexicano Genómico, estaba pensando que la pared de acá arriba está buena para poner a todos los que están Juntos por la Salud, porque ahí sí van a caber todas las empresas, fundaciones y demás, porque efectivamente, ya no caben en esta, en este banner, ya son muchas, y eso de verdad emociona, emociona bastante.

Entonces, pues muchas gracias Héctor y a todas y a todos, señor canciller, muchas gracias.