Inauguran a pesar de todo …y más

El Secretario General de la Central Campesina Cardenista, Max Correa Hernández, expresó su rotundo rechazo a los actos violatorios del Estado de Derecho que el Gobierno de la República ha llevado a cabo en contra de los intereses del núcleo agrario de Santa María La Asunción Tepexoyuca y San Jerónimo Acazulco, en el municipio de Ocoyoacac estado de México, al entregar el pasado miércoles, el Presidente Enrique Peña Nieto, la autopista La Marquesa-Toluca.

La entrega que hizo el Jefe del Ejecutivo Federal del tramo de la autopista, La Marquesa-Toluca, atraviesa los terrenos de este núcleo agrario el cual es un pueblo originario indígena y que tiene un amparo federal que le otorga la suspensión de plano y la cual está en el expediente del juicio 1165/2014 radicado en el Juzgado Tercero de Distrito en materia de Amparo en Juicios Federales en el estado de México.

Esta suspensión de plano y de oficio fue concedida a los ejidatarios para que todas las autoridades federales no priven de sus bienes al núcleo agrario de Santa María la Asunción Tepexoyuca y San Jerónimo Acazulco ni en su propiedad  ni en sus derechos, precisó el dirigente de la CCC.  No obstante esta autopista atraviesa terrenos de los ejidatarios.

“Sin embargo el día 20 de julio de 2016, el Presidente Enrique Peña Nieto, inaugura el tramo de la autopista La Marquesa-Toluca con la presencia del Gobernador del estado, Eruviel Ávila, y del Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, pasándose por el arco del triunfo esta resolución, esta suspensión de plano de este núcleo, con lo cual priva a los quejosos en sus derechos y en su propiedad omitiendo el cumplimiento de esta suspensión concedida por un Juzgado Federal en materia de amparo”, argumentó.

En entrevista, Max Correa Hernández, enfatizó que este acto que encabezó el Jefe del Ejecutivo Federal es violatorio de los derechos que le asisten a este pueblo originario que están consagrados incluso en el acuerdo 169  de la Organización Internacional del Trabajo.

Incluso, señaló, la Central Campesina Cardenista sigue pensando que el famoso perdón que el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, ha solicitado a los mexicanos, para este caso concreto, vuelve a ser un acto de hipocresía.Ante esto, es necesario reparar este atropello y lamentamos que el Presidente de las República vuelva a caer  en un craso error atentando contra los derechos de los pueblos originarios y más cuando la obra fue concedida a Juan Armando Hinojosa, dueño de Grupo Higa.

El mismo Presidente de la República reconocía que para realizar este tipo de obras de infraestructura había que sortear una serie de actos jurídicos, de derecho de vía y desde luego son necesarias para la movilidad para la productividad de nuestro país, contra lo cual, no nos oponemos, aclaró.

Aquí, en este caso, el Presidente Enrique Peña Nieto, no quiso enterarse y sus asesores no le informaron que había una suspensión de plano de este núcleo agrario. Por ello, queremos denunciar este hecho y desde luego hacerle el llamado al Primer Mandatario de la Nación y al Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza para que se corrija esta situación y se pueda dar una indemnización sustentable que es lo que en este caso el núcleo agrario exige y también la Central Campesina Cardenista.

 

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